viernes, 31 de julio de 2009

Biografía de Marcos -- Martín Rivas --

Nació el 10 de Enero de 1985 en Vimianzo, La Coruña.
Es hijo del conocido periodista, novelista y poeta Manuel Rivas y de María Isabel López Mariño. Martiño comenzó su carrera como actor siendo un niño, en la serie de Voz Audiovisual para TVG "Mareas Vivas". Trabajó en ella de 1998 a 1999, en las temporadas primera a tercera. En 2005 tuvo también un papel de reparto, como David, en las dos primeras temporadas de "Maridos e mulleres", de Zénit Televisión para TVG. De las teleseries del ámbito autonómico gallego dio el salto a las estatales con títulos como "SMS" (Globomedia para La Sexta), en un rol episódico de los capítulos 121 a 125.

Académicamente, además de continuar su formación como actor en la escuela Espazo Aberto, estudia 4º curso de Comunicación Audiovisual' en la Universidad de Santiago de Compostela.

Su Historia en TV
El despegue se produjo hace unos 12 años, cuando tenía 12 y vivía con su familia en Vimianzo. Su hermana llegó un día a casa contando, toda excitada, que en el tablón del Conservatorio de Carballo, en el que estudiaban música los dos hijos de Manuel Rivas, se anunciaba un cásting de la serie Mareas Vivas.

"La prueba se iba a hacer en Camariñas, Laxe y Muros", querían chavales con gheada y seseo, o al menos con buen gallego. El día de la selección, su madre se disponía a llevar a su hermana, que era la que estaba interesada, y le dijo a Martiño, "¿vienes con nosotras o te vas a quedar ahí tirado viendo la tele?". El chico cogió el mando, apagó el aparato y fue. En la prueba, le pidieron que contara una anécdota. Y al final lo escogieron a él y dejaron fuera a su hermana. Más tarde trabajó en Maridos e mulleres (TVG), y en SMS (con Globomedia, para La Sexta). Y la productora de Emilio Aragón debió de quedar contenta con este trabajo, porque lo volvió a llamar para El internado, una serie que combina el suspense con la habitual trama adolescente. Martiño, en la serie, que lleva emitidos cuatro capítulos, tiene 16 años y se llama Marcos. Claro que Martiño, en su salto a la fama, ya no es Martiño. Ahora, sin quererlo, se llama como una novela chilena del XIX.


Martín Rivas dice ahora que se dio cuenta en una cafetería de que debía traducir su nombre. "En Madrid, en el Starbucks, el camarero te pregunta cómo te llamas al tomar nota del pedido. Allí siempre entendían Martino, Martico, Martillo... Así que decidí cambiar". Cuando a Martín se le pregunta qué opina de ello su padre, contesta que prefiere "no meter a la familia en estas cosas" y que cambiar de nombre, entre los actores, "no es una costumbre extravagante".

Se castellaniza el nombre, sí, pero el deje permanece. Algunas de las críticas que se leen van por ahí. Por su acento gallego. Y él se defiende asegurando que es por exigencias del guión, porque interpreta a un coruñés. Si algún día le toca interpretar a un murciano, dice que "habrá que adecuarse": "Un buen actor debe ser versátil", "como Leonardo DiCaprio" en Diamante de Sangre, "con su acento surafricano perfecto"

Espera ganar en caché, y terminar su cuarto curso de Audiovisual si algún día le falta el trabajo. Luego, "a los 50", no descarta pasarse a la dirección, que era lo que le gustaba de pequeño.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

mmmm aii ze me hace muiii guapo0 yo0n seve superr lido0n en la serrie co0n sus labio0z ro0jaz k se me anto0jan demanaciiado0 jejejeje¡¡¡¡mmmmmm =) atte: vero0 de mexico0 je

dariana dijo...

esta bien guapos yon y martin los amo

dariana dijo...

son mis fans nunca me pierdo el internado

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